L´hemos liao parda

Aquí estoy de nuevo, queridos leyentes y leyentas, para contarles una nueva pifia. Aunque esta vez puedo decir que no fui yo la causante; ya me puedo reir a gusto de Novio: él también tiene una tremenda…

Dios nos cría y nosotros nos juntamos.

La cosa fue asín: estábamos pasando unos días en Valladolid, en su pisito de sufrido estudiante. Salimos el sábado, y nada más cerrar la puerta, dijo: ¡LAS LLAVES!

Las llaves estaban puestas. (En el otro lado de la puerta, claro. Si no, no tendría pequeño desastre que contaros y habría tenido que actualizar hablando sobre los Presupuestos Generales del Estado, o algún otro tema igualmente divertido)

Después de los pertinentes cabezazos contra la pared y juramentos (por su parte. Yo sólo me reía, feliz por no ser ya la poco espabilada de la relación. Hasta que caí en la cuenta de que mi maleta – que por cierto, es fastuosa. Me dan ganas de colgar una foto. Tengo una maleta preciosa, la quiero – y todas mis cosas estaban dentro. Entonces ya no me reí con tantas ganas) pensamos en qué hacer. Lo primero que se nos ocurrió fue llamar a su casera:

A falta de una foto de esa casera en particular, pongo esta otra.

Y le pedimos una copia de las llaves. Vaaaale, nos las habíamos dejado puestas y, con toda probabilidad, no íbamos a poder abrir con otras, pero no se puede perder la fe. There can be miracles when you believeeeee

http://www.youtube.com/watch?v=CxIN79n4jVo

A todo esto, eran las 12 y cuarto de la noche, y la señora en cuestión nos abrió la puerta (de su casa. Recordemos que si fuese la nuestra, no habría historia) en pijama, sobada.

Efectivamente, las llaves no abrieron. A la mierda, Maraya y Güitni, todo es una gran mentira y el Príncipe de Egipto no mola nada de nada ¬¬

Segunda opción: llamar a un cerrajero. Pero nos salió la vena de la Cofradía del Puño y no nos apeteció tener que vender algún órgano para pagar la clavada que nos podían meter un sábado a esas horas. ¡Ostras! ¡Si es sábado y hemos quedado! Bueno, salimos y a ver qué se nos ocurre.

Y lo que se (me) ocurrió fue…llamar a los bomberos. Si acuden a bajar gatetes de los árboles, a ver por qué no van a poder entrar por una ventana y abrirnos desde dentro. El alcohol hizo que mi idea fuese sorprendentemente bien recibida, y decidimos que a la mañana siguiente, llamábamos.

Igual era conveniente olvidarse las llaves en casa más a menudo. O quemar un poco las cortinas del salón, o dejarse el gas abierto…

En cuanto al alojamiento para esa noche, teníamos varias opciones:

1-

2 – Dormir en casa de un amigo de Novio. Con un montón de familiares que habían venido a una boda.

3 – Hotel

4 – Ir a una residencia de estudiantes que dirige otro amigo de Novio.

Nos decidimos por la cuarta opción, por aquello de que nos salía gratis y lo de los cartones no nos acababa de convencer.

El director de la resi nos acogió amabilísimamente…en su habitación. Realmente eran dos habitaciones separadas por una puerta: él durmió en una, haciendo alarde de toooda su potencia roncatoria (que era mucha. Una vez hasta se despertó con su propio ronquido) y nosotros estábamos en la otra, hacinados en una cama de 90, y con dos jaulas de periquitos a medio metro de distancia.

Los putos entrañables pajaritos no pararon de piar en toda la puta noche, lo juro. No me explico cuándo duermen esos putos simpáticos animales, si por el día no pararon de…ehm…intentar procrear.

Yo cerraba los ojos e intentaba abstraerme, a ver si me dormía…

¡PÍO!¡PÍO!

¡PÍO!¡PÍO!

¡PÍO!¡PÍO!

¡PÍO!

Al día siguiente, cuando logré calmar mis ganas de extinguir una especie, la misma gente que la noche anterior había aplaudido mi idea, decidió que lo de llamar a los bomberos era una tontería.

– Pero…pero…¡son un servicio público! ¡Están para ayudar a la gente! ¡A ellos seguro que no les importa, si nada les hace más ilusión que ver la sonrisa de un niño que por fin puede entrar en casa! (niña, en este caso)

Pataleé un montón, pero no convencí. Jo. Con lo chulo que habría sido ver llegar un camión de hombres musculosos competentes profesionales al rescate. Y luego, una vez cumplida su misión, me cogerían entre todos en plan vedette y nos haríamos una foto.

Gracias al Cuerpo de Bomberos de Valladolid por los servicios prestados. (Soy la de la boa de plumas)

En fin. Pasó lo que tenía que pasar: los hombres fueron poseídos por el espíritu de MacGyver, e intentaron abrir la puerta con una tarjeta de crédito. Una puerta de seguridad, blindada.

La tarjeta no sirvió.

Lo intentaron con una carpeta de plástico.

Tampoco.

Yo me dedicaba a hacerles fotos, escéptica…fotos que no puedo subir porque no sé dónde narices he dejado el cable del móvil. Cuando lo encuentre, las subo.

Y al final, para mi pasmo, abrieron.

Briconsejo 1: cerrad siempre la puerta con llave, porque sino, aunque sea de seguridad, cualquiera ( cualquiera que sea un poco hábil. Tranquilos: nunca allanaré vuestras moradas) puede abrirla con un trozo de plástico.

Briconsejo 2: dejad siempre el cable del móvil en el mismo sitio, que luego no lo encontráis.

11 comentarios

Archivado bajo Uncategorized

11 Respuestas a “L´hemos liao parda

  1. María (ruvia)

    Jajajaja, sublime, como siempre.
    Te lo juro que me da mucho, muchísimo miedo si algún día llegamos a juntarnos… por lo menos se alinearán los planetas o algo, qué se yo.

  2. MANU

    Desde luego no t aburres nunca,siempre tienes alguna aventura que contar, que bien, asi m alegraste un poco mi primer y deprimente dia d clase(q ganas d terminar!) en el q como todos ls años nunca se el horario ni ls clases…

    P.D. regreso a la biblio,t vere algun dia??? jejeje

  3. Tremendo relato, jajaja, muy bueno! Menos mal que salísteis de fiesta, anda, que os quiten lo bailao’

    Muchos besos. Que bien que hayas vuelto Dorothy!

    fdo: el dejota!

  4. Siempre se juntan el hambre con las ganas de comer…

    Neni, creo que los bomberos cobran por el tema despistes osea que os habéis ahorrado una pasta. Además, no es por quitarte la ilusión, pero la última vez que vi a los bomberos en acción eran más del tipo Fernando Esteso que del tipo Darek…

  5. Hidalgo

    No sabia yo que el personaje Novio lo interpretaba alguien…mmm…interesante, tendre que cotillera a ver quien es,ajja. Es broma, veo que encontraste la horma de tu zapato!!

    Bss

  6. M

    En mi caso, en plena mudanza de un piso horrible, me dejé las llaves dentro. Ni tarjetas, ni plástico, ni patadas, ni charlas con presidentes de comunidad, de hecho ni siquiera los cerrajeros lo consiguieron. Sólo los maravillosos bomberos lo lograron. Juro que sonó música de peli de superhéroes cuando los vi llegar a la plaza en la que se situaba el portal. Desmontaron una ventana (subiéndose en un mini camión de bomberos para llegar), entraron y me abrieron por dentro.

    También serían las 12 de la noche…

  7. Buah, a mí no me sorprende nada que abrieran la puerta con algo de plástico.

    En mi casa tenemos (o teníamos, a lo mejor se perdió cuando hicimos -hicieron- obra) una radiografía para cuando el vecino se va de casa sin llaves (dejándolas puestas o no: qué más da), cosa que pasa una o dos veces al año. Por eso me rompí el dedo del pie: para tener radiografías extra para estos casos, que el hombre está mayor y nos da pena que se quede en la calle (es que en nuestra casa no coge, no somos tan desalmados como para no planteárnoslo siquiera).

    Septiembre ha pasado y no te he visto el pelo por Madrid (ejem). Seguro que vienes cuando yo vaya a Barcelona¬¬

  8. Jopeeee, no me deja editar el comentario, qué caca.

    Quería añadir que casi me hago pis con la foto de La Casera. Soy simple.

  9. doctor b

    Desde luego con todas las cosas que te pasan podían hacer una serie o una película en plan expediente x. Tu compañera podia ser belén tranquilamente, que también es una joyita.

  10. Hola chica.

    Vayamos por partes:

    1- Cuando vuelvas por mi librería si quieres tener un trato ligeramente superior al ya exquisito que seguro te dan, pregunta por el tío de la cueva (Javi)

    2- He preguntado y mirado yo mismo, pero nada, nadie sabe nada de un billete por el suelo. Con el lio que hay estos días probablemente entre patada y patada habrá acabado en la ruta, lo siento.

    Saludos y para lo que quieras.

    Javi

  11. María

    Yo estoy contio para matar a los periquitos. Hará un año tuve que dormir en una terraza, porque sino me tocaba dormir en una cama hundida¬¬ y nada, yo inocente de mi acepté..pero no me di cuenta que dos jaulas de periquitos dormian conmigo, y uno de ellos viola a su novia…asi que tuve una noche muy bonita, donde me cague en los periquitos, y no dormí…
    Asi que hagamos plataforma o algo…como en la comuna hippie 😎

Deja un comentario